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JMJ

Aldebarán

¿Esta es la democracia que los indignados reclaman? No, gracias, a mi no me representan.

Tenemos una izquierda sovietizada, el aborrecimiento de esta izquierda al cristianismo es junto con la familia el único baluarte que tienen que salvar para hacer de los ciudadanos átomos dispersos y por tanto, fáciles de mandar y reglamentar. Por eso las dos instituciones están en el punto de mira de ZP y esta radical izquierda.

Es intolerante contra el Papa, pero estas jornadas servirán para ver su sectarismo y su intolerancia por las creencias de los demás.

Jamás defenderán la libertad de los demás, porque ellos mismos son antiliberales.

Hoy día la derecha fascista totalitaria no tiene en España ningún partido con representación, ni ningún apoyo o disculpa. Sin embargo la izquierda radical totalitaria sí tiene partido que la representa y otros que la apoyan. ¿Qué país que tenga o haya tenido un régimen comunista es objeto de envidia por su alto nivel de bienestar? Ninguno.

Hoy sobrevive Cuba, que su muro de la vergüenza es el mar, dos millones de cubanos viven hoy en Florida.

Desde hace  4 años se sabía que la JMJ iba a ser en Madrid y ahora estos anti sistemas se oponen a dichas jornadas, ¡qué visión de País para el exterior! El Papa es el líder espiritual de más millones de personas que de individuos indignados, que ya no los llamaría así, sino de intolerantes, ¡vaya democracia real ya! No puede haber mayor cinismo en argumentar para oponerse a ocupación de espacio público ¿y el que ocuparon ellos ilegalmente durante tres meses! Para esta intolerancia no hay espacio para jóvenes venidos de los cinco continentes en unas jornadas pacíficas y de respeto. Aluden también al gasto público cuando se financian ellos mismos y reportarán millonarios beneficios a miles de comerciantes. Algo que estos sectarios no han hecho, sino todo lo contrario.

Ante la manifestación anti-Papa se ha visto a las claras que las protestas de estos intolerantes responden a una clara ideología sectaria y radical y no a un espíritu de verdadera regeneración democrática.

Desde que ZP hizo su conjura con estos radicalismos se olvida que las juventudes merecen también respeto en esta democracia nuestra donde las libertades parecen que son para los mismos que pecan de totalitarios.

Esta Jornada son jóvenes de todas las partes del mundo con una misma creencia y fe, más allá de lenguas, razas y naciones.

Si Stalin levantará la cabeza y vieran las JMJ encontraría las respuestas  a su irónica burla al cristianismo.

Por lo demás serán estas JMJ una bocanada de aire fresco  para un País sumido en el pesimismo de una crisis política, económica y moral. Existen principios de validez universal que pueden ser aceptados  por todos, creyentes y no creyentes.

Termino con una cita de Gandhi: “nosotros mismos debemos ser el cambio que deseamos ver en el mundo, todo cambio debe venir de uno mismo, no del exterior”.